Lo que no cacarean los buitres del imperio

Mientras que por estos días, en varios medios de prensa y en las redes sociales se ha cacareado insistentemente sobre la reciente muerte de un preso común en Santiago de Cuba, y que los grupúsculos a sueldo del imperio han querido presentar como un “disidente”, , en el ilegal centro de torturas que mantiene la Casa Blanca en Guantánamo no se detienen las violaciones del derecho internacional.

Esa instalación permanece allí y hay individuos de distintas latitudes que siguen detenidos de forma arbitraria y por tiempo indefinido.

El actual gobierno del ¿Premio Nobel de la Paz? Barack Obama,  a pesar de que había prometido cerrarlo hace un año aproximadamente, lo que ha hecho, al parecer ha sido ampliarlo, sin embargo de eso, ninguno de esos medios, ni ninguno de sus leguleyos bien pagados  para difamar de Cuba a través de las redes sociales dicen ni media palabra al respecto.

Tampoco dicen que hace 10 años que el Gobierno de Estados Unidos abrió esa cárcel, a propósito de su crucial campaña contra el “terrorismo”, luego de los aun imprecisos sucesos del 11 de septiembre del 2001, y mucho menos precisan que su particular batalla contra el terrorismo es la más descarada y sínica política de doble rasero a la que haya asistido la humanidad.

Los buitres asalariados no argumentan tampoco que detrás de las tenebrosas alambradas del centro de torturas en la ilegal base de Guantánamo, se consolida y reafirma a cada minuto la contravención de los pilares más fundamentales de la justicia y los derechos humanos, como el derecho a un juicio justo y el derecho a no estar detenido de manera arbitraria.

En cambio han vociferado con aseveradas mentiras y con la falta de escrúpulos que caracteriza a quienes venden su alma al diablo, que el delincuente, golpeador de mujeres y violador de las leyes cubanas, Filman Villar, recientemente fallecido, luego de recibir cuanta atención médica necesitó es un “disidente Cubano” y lo presentan como un héroe.

Pero no hablan nada de los millones de hambrientos en Estados Unidos, de los miles y miles que han quedado sin casa, sin trabajo, sin derecho a la salud, ni la educación, tampoco ni una palabra de las palizas que reciben los indignados en Nueva Cork, ni de los miles y miles de jóvenes muertos en guerras que ni ellos mismos sabían a qué se debían….

Entonces… esta nueva arremetida contra nuestra invencible patria no es más que un nuevo cacareo de gallinas que no saben donde poner el huevo, pero que si han encontrado el camino más asqueroso y bajo para engrosar sus bolsillos.